Por eso nos gusta tanto el deporte, porque sucede lo improbable, porque a veces los sistemas de competición, tratando de arrastrar más público a los campos y a las teles, ayudan a que la sorpresa acampe a la vuelta de los grandes favoritos.
Venimos de una final four donde tres equipos con los mayores presupuestos, CSKA, Barcelona y Real Madrid no fueron capaces de levantar el trofeo, y el a priori, Cenicienta, Olympiakos del Pireo, que para más inri, había sido campeón el año anterior también desde el anonimato en el favoritismo, tampoco contaba para los aficionados, para la prensa y para las apuestas deportivas.
Yo mismo, que me gusta hablar de basket en general y me gusta hacer ciertos pronósticos en webs de basket, en prensa y revistas especializadas y en las barras de los bares, la pifié bien pifiada dando mi favorito y mis razones.
Pero revisando bien toda la información previa, creo que con un estudio detallado de la capacidad mental de Vassilis Spanoulis y sus secuaces, que ya habían remontado la final de 2012 estando 19 abajo en el tercer cuarto, no hubiera sido nada descabellado pensar en que una victoria suya entraba en el campo de la probabilidad.
En semifinales la victoria de los griegos estaba en 3.25 aproximadamente y en la final había cuotas de unos 2.35, en definitiva si yo, tonto de mi, que no lo hice hubiera trabajado con 50€ a su victoria contra CSKA, le hubiera sacado a ese negocio 162€ y si esa misma cantidad la hubiera puesto en la final a favor de los de Spanoulis,Hines and company, el montante total ganado sería de 381 euritos para la buchaca. Por ejemplo…
Creo que tenemos poca memoria y si recordamos lo fuerte mentalmente y lo intensos que estuvieron el año pasado, eso nos hubiera dado una información preciosa, porque la plantilla sufrió muy pocos cambios.Y el entrenador, que si era nuevo,se adaptó al juego del equipo y sacó el mayor rendimiento.Miro en una casa de apuestas como es Interwetten y descubro una cuota interesante para el inicio de los playoffs, pagan a 3,40 la victoria del CAI Zaragoza contra el Valencia, estando los maños en un momento de forma muy bueno.
La historia del deporte y la del baloncesto está trufada de muchísimos ejemplos de equipos que han jugado y defendido juntos sin importarle el nombre de los que tenían enfrente y eso siempre les ha dado un galón adicional de combustible motivacional.Y este campo abonado es un gran escenario para disfrutar con el tema de las apuestas, que le dan al visionado de nuestro deporte y de nuestros equipos un plus de emoción, de pasión, de diversión y un dinerito.