Quizás porque el hecho de que sentarse alrededor de un tapete les provoca una descarga de adrenalina necesaria para saltar posteriormente al parquet con todas las garantías o, simplemente, porque tienen mucho dinero y necesitan gastarlo, no se sabe. Lo que está claro es que la NBA y el poker mantienen una curiosa y larga relación llena de anécdotas. Aunque algunas no tengan nada de gracia.
Son muchos los nombres de jugadores importantes que no han escondido su afición por este juego de cartas y que, incluso, se han visto en medio de verdaderos problemas por llevarlo demasiado lejos. De los que continúan en activo destaca el base francés de los San Antonio Spurs, Tony Parker. El galo es la cara visible de la publicidad de BetClic en Francia y ha participado en diferentes torneos de Texas Hold’em.
Mirando un poco más para atrás, a la palestra sale, sin ninguna duda, el nombre de Dennis Rodman. Uno de los mejores pívots de la historia que, sin embargo, se llevó casi las mismas portadas por sus espectaculares actuaciones en el parquet como por sus locuras fuera de las canchas de juego.
Desde el 2010 Rodman apuesta por el poker. El ex jugador de los Pistons, Spurs, Bulls, Lakers y Mavericks (que se retiró de manera definitiva en el año 2000 después de lograr cinco anillos) firmó hace tres años un acuerdo de colaboración con la casa online OnlyPoker. Quizás sea solo la penúltima locura del díscolo pero genial jugador.
Ejemplos hay muchos. Es tanta la afición de algunos jugadores de la NBA por el poker que, durante la campaña 2011-2012, los dirigentes de los Memphis Grizzlies tuvieron que prohibir a sus jugadores que dieran rienda suelta a su hobby favorito durante los desplazamientos del equipo. Una medida ciertamente comprensible después de ver como dos de sus estrellas en aquel momento, O. J. Mayo y Tony Allen, se enzarzaran en una fuerte discusión tras una partida.
Mucho más lejos llegaron el ya retirado Gilbert Arenas y su compañero en los Washington Wizards Javaris Crittenton. En 2009, cuando ambos estaban en el vestuario del equipo en el descanso de un partido, se apuntaron con sendas pistolas. La razón, según los rumores, es que Arenas mantenía una deuda con su compañero de 25.000 dólares.
Este enfrentamiento no parece que tranquilizara, ni muchísimo menos, a Crittenton. En 2011, el jugador de 25 años nacido en Atlanta fue acusado de asesinato.
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