Volvamos a la técnica, de donde los entrenadores nunca debimos salir.Lo reconozco, vivo obsesionado con la velocidad del pase, con lo duro que hemos de pasar, para darle más velocidad al juego, que el pase obligue al receptor a jugar concentrado, a correr un poco más rápido, a jugar mejor baloncesto, en definitiva. Excepto los…